Actualmente cuando hablamos del futuro del automóvil, parece que todo se reduzca a vehículos autónomos, sin embargo, existen compañías que no quieren jugárselo todo a una única carta y apuestan también por las células de combustible de hidrógeno como una gran ventaja para los vehículos. Honda es una de estas compañías ya que acaba de anunciar un gran paso adelante en la evolución de esta idea.
La firma japonesa ha demostrado en numerosas ocasiones estar a la vanguardia de la tecnología, gracias a sus iniciativas tanto en el terreno de los vehículos autónomos, donde trabaja una estrategia similar a la del coche autónomo de Google, como en el terreno de las baterías de hidrógeno, al confirmar un acuerdo de colaboración junto a General Motors, otro de las compañías del mundo del automóvil.
Promover el hidrógeno
La alianza entre GM y Honda pretende darle un fuerte empujón al desarrollo de las células de combustible con el anuncio de la producción a gran escala de dichas baterías en una de las fábricas que General Motors tiene en territorio estadounidense. Según los planes anunciados, la puesta en marcha del plan comenzará en el año 2020.
Honda ya ha demostrado su compromiso con el hidrógeno como combustible, algo que pudimos comprobar en Europa con su vehículo Clarity Fuel. El próximo objetivo es conseguir abaratar la producción gracias a la fabricación a gran escala, pero para que esta estrategia dé resultados, habrá que generar también demanda por parte de los usuarios.
Control de riesgos
Lo cierto es que la obtención del hidrógeno como combustible no supone actualmente un proceso demasiado ecológico. El procedimiento más extendido consiste en transformar el metano en hidrógeno, un método que arroja monóxido de carbono a la atmósfera y, por lo tanto, contamina.
Aún así, la industria mira al hidrógeno con mejores ojos que a las baterías eléctricas actuales, por lo que es probable que de cara al futuro de los coches autónomos termine imponiéndose este combustible. Esperemos que iniciativas como la de Honda y GM terminen por dar con métodos de obtención más ecológicos., al fin y al cabo, una de las grandes ventajas de los coches del futuro debería ser que no contaminen o contaminen lo menos posible.
